Una de las mayores debilidades que sufren los call centers es el absentismo laboral. Un mal común en operaciones grandes, con perfiles jóvenes. Escuchar a "Gurús" de Gerencia invocar al "Compromiso" como el secreto para combatir este flagelo, hace que muchas personas se confundan y pierdan el foco.
Promociones sorteando premios, charlas con los "líderes de más alto rango", cestas y regalos, son solo algunas de las opciones que toman las grandes corporaciones para fidelizar a sus agentes. Por sí solas, estas acciones son un salto al vacío.
¿Has medido el impacto de ellas? ¿Qué pasó antes, durante y después? ¿Cuál fue el % de mejoría durante la promoción? ¿Se motivó realmente la gente cuando “compitió” por ganarlo? El compromiso, más allá de ser algo tangible (un premio) debe construirse a través del modelo de los líderes (cada uno de los niveles).
Sino, estaríamos entrando en una espiral interminable con un mensaje: haz tu trabajo y te premiaré. Los premios son para aquellos que presentan un desempeño sobresaliente, no para quien cumple con los requisitos básicos de su posición.
El liderazgo, por el contrario, cimienta bases más duraderas y fuertes. Llegar a tiempo, demostrar conocimiento de lo que haces (importante compartir ese conocimiento siempre), dar oportunidad al equipo de participar, respetar opiniones y explicar cuando no se puedan poner en práctica. Hacer seguimiento orientado al cumplimiento de un objetivo, son una serie de hábitos saludables que requiere cualquier operación.
No pierdas el tiempo ideando “promociones”, revisa si tus líderes están moviendo a la gente (cada quien con su estilo, respeta siempre eso), si lo respetan por lo que es y representa, y trabaja a partir de allí. Premia, el cumplimiento de objetivos importantes, que tengan sentido económico y que aporten económicamente a la operación, así tendrás un ambiente laboral y generaras las condiciones económicas para que ese “premio” haya tenido sentido.